No nos “empodere”. Páguenos.

Al no haber recibido respuesta al e-mail que envié a los organizadores, decido hacer esta carta pública. Sería bonito encontrar soluciones y puntos de encuentro. Si no es por mí, que sea por todas mis compañeras!
Carta abierta al Institut Gestalt:
Luego de vuestra invitación a exponer mi trabajo artístico en las salas del Institut Gestalt de Barcelona, durante el Women´s Leadership Congress a realizarse este Julio en dicha ciudad y tras comunicarme que mi participación se prevee sin honorarios, me parece importante explicar por qué me niego a hacerlo.
Esto es mi profesión, no mi hobby. Realizo obras comprometidas en donde expongo mis experiencias de maternidad, temática migrante, de género y denuncia social.
En mi obra pongo mi mirada al servicio de mujeres que han pasado experiencias de violencia obstétrica y al servicio de personas migrantes que han pasado y pasan por otros tipos de violencia casi diariamente.
Mi trabajo incluye el activismo como mujer, como madre, como migrante y como persona comprometida a mejorar el mundo. Parte de mi activismo se relaciona con el objetivo de vuestro Congreso: sacar a la luz la precariedad que las mujeres, las madres y las artistas tenemos dentro de un sistema que permanentemente nos da la espalda.
Dar difusión a mi trabajo me gratifica porque cubre la necesidad de crear y airear nuevos referentes en relación a temas de los que suele darse una versión unilateral que tristemente no nos representa. Sin embargo la mera difusión no basta para mantener una familia a flote, ni paga gastos de producción de obra, ni paga reparaciones de equipo cuando se estropea, ni cursos de capacitación y desarrollo, ni gastos de transporte, ni canguros durante las horas de ausencia – ya que tampoco veo a los niños y niñas bienvenidos en la web del Congreso.
Según se me informó al invitarme, tampoco las ponentes del evento estarán recibiendo honorarios. Entiendo que cada una de las personas que acepta esta situación tiene sus razones. Lo que me llama la atención y cuestiono es que un Congreso sobre liderazgo y empoderamiento femenino no “empodere” económicamente a las mujeres que lo conforman ofreciendo experiencias, contenido, obra. Sin ellas y sin su trabajo, evidentemente no habría Congreso.
Sobre todo me desconcierta porque la entrada a quien quiera asistir al congreso no es gratuita, sino que cada concurrente pagará 150€ para “empoderarse”.
Si se quiere empoderar a las mujeres hace falta reconocer económicamente su trabajo.
Dudo que dentro de este tinglado “femenino” sea una mujer quien decida que las mujeres continuemos trabajando gratis. Figura como organizador del Congreso el Institut Gestalt y es en su sede donde se me invitaba a albergar mi trabajo ¿quien en la dirección se atreve a “empoderar a las mujeres” de esta forma?
¿Vuelve a ser un hombre, quien se beneficia de nuestras ganas de compartir, nuestras ganas de sostenernos, nuestras ganas de crear un entorno más empático, justo y amoroso para nuestras hijas e hijos?
Como verán ya estoy empoderada. Creo que la mayoría de las mujeres lo estamos.
Día a día nos enfrentamos a acosos y abusos varios. Difícil no empoderarse al estar expuestas a estas experiencias. El empoderamiento termina siendo una consecuencia natural a tener que defender nuestra dignidad, explicar porqué nos merecemos lo que es obvio, y en algunos casos preferir optar por un pequeño suicidio profesional a dejar que nos sigan metiendo el dedo en el ojo.
Agradecería que en vez de hablar de empoderamiento, se planteen hablar de justicia. Se planteen darnos la compensación que nuestro trabajo se merece. Se planteen convocar bajo otro tipo de paradigma que ponga por delante nuestras necesidades y derechos.
Si nos pagaran lo que merecemos, vuestro congreso de empoderamiento no tendría razón de existir y ese sería el verdadero éxito de la sociedad: No generar en las mujeres precariedad, frustración y pobreza para luego tener una “solución” que vendernos.
Imagino que enfrentarse a la verdad de que si no hay problema no hay quien compre soluciones, da miedo. Pero entiendo que el Gestalt serviría para darle luz a la sombra. Esta sombra es la vuestra.
Cordialmente,
Ana Álvarez-Errecalde
Aclaración: La siguiente imagen no es de mi autoría. La encontré en la web bajo uso libre .
Gracias a Guillem de México puedo acreditar la imagen “Puppet Not” a altair4444